Conocida como la Isla de Onza, esta pequeña y pintoresca isla de forma rectangular deslumbra por su singular belleza y su rica biodiversidad. Situada dentro del archipiélago biinsular junto a su hermana isla de Ons, despliega un espléndor natural que es tanto intrigante como hermoso en su simplicidad y autenticidad.
Ubicación y Descripción
La Isla de Onza se encuentra en la provincia de Pontevedra y se extiende sobre 32 hectáreas. Su perfil se asemeja a una ballena nadando, una imagen cautivadora que evoca tanto la diversidad de la vida marina como la sutil armonía de la naturaleza. La cima de la isla alcanza una altura impresionante de 68 metros, proporcionando unas vistas panorámicas que son absolutamente impresionantes.
Costas y Playas
Las costas de la isla son escarpadas y robustas, dando un sentido de la potente resistencia y la vitalidad de esta pequeña isla. A pesar de su terreno robusto, la Isla de Onza cuenta con un par de pequeñas playas ubicadas al norte y al sur. Estas playas, aunque casi inaccesibles debido a los fuertes acantilados que las resguardan, son verdaderos refugios de paz y serenidad, bordeados por arrecifes que añaden un encanto adicional al paisaje.
Vegetación y Vida Silvestre
Lo que la isla carece en términos de dimensiones, lo compensa con creces con su rica vegetación arbustiva. La isla está cubierta de vegetación verde, que se vuelve aún más densa en su parte occidental. Este rincón de la isla es un importante lugar de nidificación para las aves marinas, lo que convierte a la Isla de Onza en un punto de interés para los amantes de las aves y la naturaleza.
Autenticidad y Conservación
A pesar de su modesto tamaño, la isla no tiene árboles. Sin embargo, esto no disminuye su belleza, sino que añade un toque de singularidad a su encanto. La isla es totalmente virgen, sin ninguna construcción a excepción de una barraca construida por los militares. Este hecho refuerza el carácter auténtico y sin pretensiones de la Isla de Onza, un lugar donde la naturaleza gobierna suprema.
Nuestro consejo
Por lo tanto, la Isla de Onza es un tesoro escondido en la provincia de Pontevedra. Su encanto radica en su sencillez, su biodiversidad y su belleza natural que se manifiesta en su espléndida vegetación, sus acantilados escarpados y sus playas recluidas.